El capítulo comienza con Karane en un campo de flores blancas. Rentaro llega tarde y se disculpa, pero Karane, con su actitud tsundere, le reclama que debió llegar antes. Rentaro, sintiéndose mal, pero este le dice que alguien con 11 novias no es digno de ser su pareja. Herido, Rentaro se aleja y, cuando Karane intenta alcanzarlo, él desaparece entre la niebla. Despierta entonces de lo que era una pesadilla.

De vuelta en la azotea, Rentaro trae galletas en forma de corazón, emocionando a todas, especialmente a Kurumi, Rentaro dice que son especiales para compartir con la persona amada. Mientras las novias disfrutan el momento, Karane, con su actitud tsundere, finge desinterés, pero se da cuenta de lo difícil que le resulta expresar sus sentimientos. Rentaro le ofrece una galleta, pero ella, nerviosa, termina dándosela a su ojo.
Hakari la molesta con un comentario sobre su pecho y Karane, molesta, le lanza una galleta en la cara, que Hakari se come con gusto.

Karane empieza a sentirse insegura al ver cómo las demás se divierten. Mientras tanto, Iku e Kusuri tienen una peculiar pelea de sumo. Kusuri, al perder, quiere usar su antídoto para recuperar su forma original y menciona que quiere «levantarse como esos jefes de videojuegos que te costó matar pero que luego reviven», emocionando a Iku.
Cuando le preguntan si le gustan los juegos, Iku dice que su hermano la obligaba a jugarlos, siendo la primera mención de su hermano en el anime. (En el manga, el capítulo 41.5 explica cómo Iku se volvió masoquista y su hermano influyeron en ello (de manera indirecta)).
Kusuri se da cuenta de que olvidó el antídoto para volver a su forma de 18 años y solo trajo la droga anti-tsundere, dejándolo en el suelo. Decidida a ganar, se lanza al combate, mientras Karane observa todo.

La batalla entre Iku y Kusuri continúa hasta que Kusuri es arrojada hacia Karane, golpeándola en el proceso. Kusuri, preocupada, se disculpa repetidamente, y las demás novias también intentan calmar a Karane, temiendo haber despertado su furia. Sin embargo, para sorpresa de todas, Karane simplemente responde: «Descuida», sin rastro de enojo.
De repente, una gran esfera de luz aparece sobre Karane, dejando a todas atónitas. Kusuri, asombrada, dice que eso es su «Esencia Tsundere» y le pregunta si tomó la droga antitsundere. Básicamente, Karane ha dejado de ser tsundere.

La esfera desaparece y Rentaro ayuda a Karane a levantarse, preguntándole si está bien. Para sorpresa de todos, Karane responde de manera tranquila, honesta y amable. Las demás novias empiezan a convivir con esta «nueva» Karane, quien ahora es más sincera con sus sentimientos. Kusuri aprovecha para ganarle en sumo, y Karane, curiosa, le pregunta si realmente le gusta. Kusuri responde que lo ve desde niña con su abuela (dato curioso).
Pronto, Kusuri se da cuenta de que la fuerza de Karane venía de su lado tsundere, y sin él, ya no tiene su poder monstruoso. Hacen una breve referencia a Broly de Dragon Ball por la «esencia» que ha perdido.

Para comprobarlo, Iku se ofrece como prueba, pidiéndole a Karane que la golpee con su bate con toda su fuerza. Karane acepta y le da un golpe, pero Iku no siente nada. Hakari, viendo la oportunidad, intenta besar a Karane, pero Mei la detiene diciendo que no puede aprovecharse de su estado. Sin embargo, Hakari se apega a Karane.
Tras un poco de fanservice yuri, Karane comienza a sincerarse con cada una de las novias, diciéndoles que son bonitas o confesando que quiere aprender a tejer con Shizuka y Meme, pidiendo unirse a ellas. Todas estas escenas conmovedoras hacen que el «alma» de Hakari parezca abandonar su cuerpo… para que Mei la recupere inmediatamente.


Hakari comenta que esta versión de Karane es más adorable y educada, no como la “bruta” que solía ser. Sin embargo, Rentaro la mira con seriedad, e Iku dice que, aunque Karane haya cambiado, a ella le gusta la de siempre. Esto hace reflexionar a las demás, quienes admiten que extrañarán a la Karane original.
Rentaro entonces propone crear una nueva medicina tsundere, y todas comienzan a reunirse para hacerlo. Pero Karane las detiene y, con una expresión reflexiva, dice que no tomará la medicina. Confiesa que antes no podía ser sincera y se pregunta en voz alta: “¿Se imaginan a mi antigua yo tejiendo?”. No quiere volver a ser la de antes; desea quedarse así.
En ese momento, Rentaro se acerca y le pide dar un paseo con él.

Durante el paseo, caminan tomados de la mano por la escuela. Karane, con una sonrisa, comenta que le encanta sostener su mano y que siempre quiso decírselo, pero nunca pudo. Rentaro le responde que lo sabía.
Siguen caminando hasta llegar al lugar donde Karane le confesó su amor por primera vez, junto con Hakari. Nerviosa, Karane le pregunta: «¿Sabes por qué quise salir contigo?». Sonrojada, le pide que le diga la razón.
Rentaro le sonríe y le dice: «Es muy sencillo. Me enamoré de ti porque eras terca, pero también amable, tímida y un poco difícil de tratar. Todo eso te hace adorable. Ese día me enamoré de la Karane tsundere».
Luego, con seriedad, añade: «Si en el fondo de tu corazón quieres seguir siendo como eres ahora, lo aceptaré y me esforzaré en amarte así, al igual que antes. Pero si solo quieres cambiar porque odias la persona que eras antes… jamás lo aceptaré».
Finalmente, concluye con firmeza: «No dejaré que nadie, ni siquiera tú, desprecie a la Karane que tanto quiero».
Las palabras de Rentaro conmueven a Karane, quien rompe en llanto y, entre sollozos, dice que quiere volver a ser como antes.


La segunda mitad inicia ya anocheciendo con Kusuri y la droga tsundere ya lista, Shizuka menciona que la termino durante los comerciales, pero Nano diría que en la versión subtitulada no hay comerciales, buen detalle ese para los que lo vemos en streaming. Karane se tomaría la droga y empezaría a brillar, Kusuri mencionara que la droga antitsundere había sacado su esencia tsundere del cuerpo, y había quedado esparcida en el lugar y que la nueva lo que hacía es volverla a absorber. Tras unos segundos dejaría de brillar, y preguntaría que si ya había vuelto a ser tsundere, de una forma que obvio se notaba que no funcionó. Kusuri diría que esto era malo, pues si no había vuelto a ser tsundere era por qué la esencia que había esparcida se había disipado y desaparecido, ya no habiendo vuelta atrás pues no podría recuperar su esencia. Rentaro diría que no importaba y que debía haber una manera de volverla a hacer tsundere y que el la encontraría, Hahari diría que por ese día ya era suficiente por lo tarde que era, Meme diría que si no podía actuar como tsundere, diciendole varios cumplidos para probar, los cuales no funcionaron pues hasta daba pena ajena como lo hacía y Meme de tanto cumplido que le dijo se avergonzó y desapareció.

Hahari invitaría a Karane que se quedará en su casa pues si sus papás la vieran así se preocuparían, obviamente que segundas intenciones no solo ella iría si no también Rentaro, más que nada para que Hahari no le hiciera nada. Ya llegando luego luego Hahari quería que se bañaran Juntas (ya sabemos por qué) aunque Rentaro se lo impidió, y parecía que habría discusión o algo asi, pero nel se aman tanto que no quieren discutir, al final Hahari se terminó bañando solo con Mei.

Rentaro, Hakari y Karane estarían en la misma cama hablando cuando Hakari menciona que esto le recordaba a cuando solo estaban los 3, siendo como empezó todo. Rentaro menciona qué según lo que se les explicó todos tienen una pizca de esencia tsundere (nmms entonces todos los somos en el fondo) diciendo que Karane puede que todavía tenga un poco en su interior, que solo es cuestión irla exponiendo en pequeñas señales para que crezca y recupere el tsunderismo, básicamente hacer cosas que causarían efecto tsundere. Así empiezan dando cumplidos a lo desgraciado sobre lo mucho que la ama y eso, fracasando pues en vez de respuesta tsundere recibió lo que de verdad sentía, luego sería con pequeñas muestras de cariño como con abrazos, pero en vez de alejarlo o algo asi, respondía el abrazo, tampoco funcionando. Sobra decir que Hakari se colaba aprovechando para recibir afecto también, y aprovechando el bug diría que tenía que hacer algo que la avergonzaría más, como tocarle los pechos (aunque en realidad solo quería recibir el mismo trato …. Que le agarraran las te..) Rentaro negándose un poco aunque al final sería convencido de hacerlo sacaria de su mochila los mismísimos guantes de iron man (aunque tapados para no tener copy) así no podría sentir como se los manoseaba, todo un arsenal antiobsenidades tiene este cabron.

Así empezaría la manoseada, pero nuevamente Karane en vez de negar lo que siente lo dice como si nada, volviendo a fracasar, Hakari diría que le enseñaría como se hace, aunque al final fue peor que ella y lo estaba gozando. Nos pasarían a mostrar que Hakari y Karane se estaban dando un baño juntas, y aquí la decepción del capítulo, se súper censuró que la escena, por si acaso no mostraré las imágenes pero siempre pueden leer el manga. En fin, Karane agradecería que la estuvieran ayudando, voy a ser rápido, básicamente Hakari diría que ahora la ayudaría a ella, así como ella ayudó cuando su madre la quería alejar de ellos y que haría lo que fuera posible. Luego de eso desde la puerta del baño empañada de escucharía como Hakari le lavaba la espalda a Karane, con unos sonidos algo cuestionables y Hahari que no soporto tanta sabrosura ya que las estaba espiando, Rentaro y Mei la encontrarían tirada toda desangrada y con un mensaje escrito por ella misma de “no me arrepiento de la vida que llegue…” obviamente en chinga la llevarían a qué la atendieran, y aquí no se si por error de coloreo o por qué se medio copiaron el diseño, pero no se vio bien el segundo cameo de Mai, bueno que después de que a Rentaro por algo que dijo Hahari se le ocurriera una idea, y teniendo a Karane lavandole la espalda a Hakari nuevamente con sonidos cuestionables acabaría el penúltimo capitulo de la temporada.


El capítulo en su es bueno y marca el principio y mitad de uno de los mejores arcos de Karane, ya solo nos queda un capítulo, ¿¿¿será que veremos una sorpresa al final??? Descúbranlo en el último análisis la semana que viene.
Eso es todo por hoy, mi compañero Lilik y yo nos despedimos, hasta la próxima, ¡¡¡chá chá chauu!!!
