Finalmente, todas nuestras protagonistas están reunidas con planes ya fijos de lo que desean hacer y más luego de que conozcan a una aparente rival que las llevará a esforzarse al máximo en sus objetivos.

El ritual de la «frentepatia» donde Umika y Yu chocan sus frentes casi como si fuera un beso es algo que incomoda a Raimon pero la propia Haruno le dejará que haga lo mismo con ella lo cual la hace ponerse muy nerviosa ¿tenemos ya a la pareja yuri secundaria?

La tan esperada aprobación del club escolar de investigación de cohetes para nuestras protagonistas llegó con una parcial negativa y es que debido al criterio de los maestros estos no vieron que fuera necesaria su creación ¿por qué? quizás sea algo raro que quieran fabricas cohetes en la escuela.

Curiosamente en este episodio será cuando la maestra de las chicas, Natsumi, se volverá un personaje recurrente y es que pese a que no les dejaron abrir su club aun así fueron aprobadas para ser un grupo de investigación, pero no tendrán ni fondos o un salón dedicadas solo a ellas.

Nuestras chicas tienen su propio lugar y es el faro, fue la primera vez que Raimon entra a dicho lugar quedando totalmente deslumbrada y ella se da cuenta de algo que nos llena de misterios… si el faro estuvo abandonado por tanto tiempo y ellos no roban luz ¿de dónde viene la energía eléctrica? todo parece indicar que es algo relacionado a Yu.

La primera actividad del grupo de investigación de nuestras chicas es ir a un evento dedicado al lanzamiento de cohetes lo cual me sorprendió porque no creí que algo así podría existir, pero hablamos de un país del primer mundo como lo es Japón.

En este evento se encuentran con la misma chica que les había ayudado a darles botellas cuando las recolectaban para la competencia contra Raimon, se llama Kei y es bien despistada por lo cual necesita algo de ayuda, pero más tarde descubrirán que es alguien asombrosa.

Kei pertenece al grupo de segundo año de su preparatoria que ganó el campeonato de lanzamiento de cohetes y cuando se pone a trabajar en ello la chica albina deja relucir su gran capacidad en dicho rubro.

A Raimon le dio mucha envidia todo lo que Kei es capaz de hacer por lo cual no se le ocurrió mejor cosa que hacer que retarla a una competición de cohetes utilizando una deuda económica que tenía la albina con Umika (?)

Con una rival adquirida y un campeonato a la vista parece que nuestras protagonistas ya tienen una motivación extra para mejorar en sus cohetes y la relación de Umika y Yu cada día es más tierna ya que sus escenas de «frentepatia» parecen un equivalente de besos y eso me encanta.